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domingo, 29 de julio de 2018

Ficus de la Iglesia de San Jacinto en Triana - Sevilla



Hoy podemos leer en la prensa

Que debido a las labores de poda efectuadas en el centenario ficus de la Iglesia de San Jacinto, aquí en Sevilla, y por falta de pre visión y delicadeza. Uno de los Símbolos de Triana ha resultado Seriamente dañado


Aquí el brazo caido
Este año, las podas y talas de árboles se convierten en problemas para el alcalde.

Lo último para terminar de enardecer a los ciudadanos ha sido el episodio del Ficus en la Iglesia de San Jacinto, 

El problema no es podar, aunque la mejor poda es aquella que no se hace, está claro que en la ciudad debe de controlarse el crecimiento de los árboles y por supuesto evitar, en la posible, el desprendimiento de ramas que puedan dañar a los ciudadanos 

El problema es -quien poda- existen excepciones, pero todos hemos contemplado que muchos en lugar de podar cortan ramas sin demasiado o sin ningún conocimiento de lo que están haciendo. Y esto en lugar de quitar problemas ocasiona el efecto contrario. Nunca debemos olvidar que los árboles son seres vivos y si no se les trata con conocimiento alteramos su evolución y a la larga tenemos más perjuicios

Según cuenta el Diario de Triana este que fuera hermoso ejemplar de ficus, ubicado delante de la fachada de la iglesia San Jacinto fue traído desde Puerto Rico en el año 1913 para sustituir a otro que un viento huracanado había quebrado

Este árbol cobija una cruz de humilladero y los recuerdos de los trianeros que acomodaban sus tertulios en los anchos pretiles que cercan su atrio

La Cruz es una obra realizada en mármol sobre una peana, un conjunto que se renovó en 1794 y que indica la existencia de una fosa de enterramiento común que se realizó en una de las grandes epidemias de peste que asolaron la ciudad, vinculada a los dominicos, llegó a tener cultos públicos en los domingos de Cuaresma

Según me informa José Elías, el Compás de la iglesia fue municipal durante muchos años. Parques y Jardines había realizado obras en el compás y en el jardín. Seguramente por una concesión del Ayuntamiento, los dominicos se apropiaron de él y lo cerraron. Los dominicos necesitan permiso de urbanismo para realizar la poda según el PGOU 

Pero en su opinión, la poda o lo que sea que le han realizado al Ficus, o como quiera llamársele lo convierten en un árbol peligroso largo plazo 

Antes de intervenir estos árboles que podrían llegar a ser singulares, deberían estudiarlo y hacerlo en condiciones. Son numerosas las ciudades que tienen Ficus espectaculares y envidiables, pero no tan maltratados como en Sevilla que parece que no son demasiado queridos, Bueno yo creo que ni los ficus ni ningún otro, en mayoría Sevilla no quiere sus árboles, esto se comprueba en el día a día    

Por Pedro Zarzo

Fuentes consultadas: Diario de Triana y ABC

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