Yo soy tu amigo y te digo: El cuchillo que me hiere lo
Por favor, no me hagas daño; devuelvo perfumado
Más si es necesario, sea
Pero sólo el necesario. ¿Que te hacen falta mis frutos?
Yo te los doy de buen grado
Estoy para darte frutos, ¿Qué te hacen falta mis ramas? Tal vez solamente pájaros Corta, por tanto mis brazos.
Sombra si la necesitas ¿Qué necesitas mi tronco?
Rumor si te gusta el cántico No te apene derribarlo
Para su servicio crezco
Algún día podré ser Y para tu bien me abato
La ventana de tu cuarto,
La mesa para tu pan, A cambio, solo te pido
La mecedora, tu arado, Por favor, no me hagas daño;La ayuda a tu jornal Más si es necesario, sea
El lecho a tu descanso. Pero sólo el necesrio
Tal vez, si llegas a viejo, ¿Qué etorbo en un sitio?
Me necesites como báculo. Piensa
Puede ser que en los inviernos, Antes de darme el hachazo
Cuando haya nieve en el campo, hasta que punto es verdad
Mis brazos le den calor Que puede estorbar un árbolA los tuyos y a sus manos,
Y yo he de ser, aunque es triste ¿Tienes que cortar dos ramas?
El tener que recordártelo, Por favor, no cortes cuatro
El último compañero Que si el daño que me haces
Que te llevará en sus brazos Cuando es por tu bien, no es daño
Y no solo en paz lo acepto
Siendo más fuerte que tú Sino con placer lo paso.
-Y en completo desamparo El que me hces sin causa A los fríos del invierno Ese si que me hace daño
Y a las llamas del verano-,
Si me ofendes, no te ofendo, Yo soy tu amigo y te digo
Si me dañas, no te daño Por favor, no me hagas daño
Más si es necesrio, sea
pero sólo el necesario
Y a veces
-Y eso que lo diga el sándalo-,
Manuel Benitez Carrasco
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